Modelo Lean management y su certificación bajo las normas ISO
Modelo Lean Management, Lean Six Sigma y la Norma ISO 18404
Es conocido que cualquier empresa que adopte un modelo de gestión Lean (“Lean Management”) debe incorporar tanto en su filosofía como promover en la gestión de sus procesos, la eliminación de cualquier tipo de desperdicio de recursos, y todo aquello que no aporta valor añadido al cliente, tanto final como interno, con un comportamiento estable y enfocado a la mejora continua.
Ello se logra, a través de la implantación en la empresa de metodologías y herramientas Lean manufacturing. Entre ellas, 5 S’s, Kaizen, ciclo DMAIC, Value Stream Mapping (VSM) y especialmente Six Sigma aplicable fundamentalmente en los entornos productivos para la optimización de la variabilidad de los procesos.
En este contexto de Lean Management se han publicado hasta el momento tres normas internacionales de normalización relativas a la aplicación de Six Sigma en estos entornos de trabajo con filosofía Lean, lo que se conoce como Lean Six Sigma:
- Norma UNE ISO 13053-1:2O11
- Norma UNE ISO 13O53-2:2O11,
- Norma UNE ISO 18404 (AENOR)
Las dos primeras (ISO 13053) tratan de los métodos cuantitativos en la mejora de procesos, en especial Six Sigma, y trata la metodología DMAIC, y describe los conceptos de voz del cliente, los procesos productivos y su mejora, y podemos observar una cierta relación con la conocida Norma ISO 9001. En esta norma se describe la escala de medida Sigma, así como otras formas útiles de medir el funcionamiento de los procesos.
En esta normas también se describen los roles del Champion, Black Belt y Green Belt, y de todos los implicados en los proyectos de mejora Six Sigma, así como un aspecto de vital importancia como las competencias requeridas por cada uno de ellos.
AENOR recoge estas normas ISO y publica en 2015 y 2017 la norma ISO 18404 para aquellas organizaciones que aplican las metodologías Lean / Six Sigma, cuyo sistema o modelo es certificable por AENOR bajo modelo propio, en la que se auditan 9 categorías: estrategia, costes, recursos humanos, calidad, producción, medios productivos, flujos, desarrollo de nuevos productos o servicios y, por último, relaciones exteriores, tanto con proveedores como con clientes.
Roles de personas y niveles competenciales en la Norma ISO 18404
Más allá y mas importante que los métodos cuantitativos para la mejora de los procesos que establece la norma, es el establecimiento de las competencias del personal clave.
Así establece la estandarización de los perfiles competenciales de los distintos niveles Lean: Lean practicante, Lean líder y e Líder experto; y en el Six Sigma, los niveles: Green Belt, Black Belt y Master Black Belt. Esta norma internacional no incluyo la figura del Yellow Belt.
Lo importante es que define las competencias y habilidades para la consecución de los niveles específicos con relación a las personas y sus organizaciones. Ello permite alinear la formación y experiencia que debe recibirse en cada perfil competencial con la aplicación de metodologías y su grado de participación en los proyectos de mejora Lean.
Pongamos como ejemplo las competencias requeridas para el nivel competencial del Lean practicante:
Este debe participar en actividades de mejora lean en la organización, sobre manera dentro de su área habitual de trabajo y operación, desarrollando las siguiente competencias:
- Trabajar en la implantación de mejoras en el área local.
- Emplear técnicas de distribución del área local para mejorar el flujo del proceso.
- Ser requerido para liderar actividades de mejora y cuantificar los beneficios generados.
- Realizar sesiones de formación sobre técnicas Lean.
- Realizar coaching a otros miembros del equipo de trabajo sobre métodos y actividades de mejora.
Por tanto, las personas toman un papel importantísimo para la consecución de la certificación en la Norma del modelo de gestión Lean.
Ello implica la imprescindible adquisición de competencias de todo el personal de la compañía que participe tanto en la puesta en marcha de un proyecto Lean como en su aplicación y el mantenimiento de la filosofía Lean Six Sigma.
Certificación AENOR del modelo Lean Management
Si una organización -ya sea manufacturera o de servicios- se quiere certificar, según la norma ISO 18404 debe: trabajar, definir, mantener y controlar una estructura Lean en aspectos como la cultura organizativa, incorporando la dirección. Y deberá definir y desarrollar un número apropiado de personas con roles en Lean o Six Sigma con los niveles de competencia adecuados y definir, mantener y controlar los procesos según la norma.
Además, esta certificación ISO permite la posibilidad de integración con el sistema de gestión de la calidad ISO 9001 que, como sabemos, está basado en siete principios de gestión: orientación al cliente, liderazgo, implicación de las personas, enfoque a procesos, mejora continua, gestión de relaciones y toma de decisiones empírica o basada en datos.
En este marco de certificación las organizaciones deben desarrollar proyectos de mejora Lean basados en la metodología VSM mediante el análisis del estado actual y futuro, la propuesta de acciones de mejora, la realización de eventos Kaizen – experimentaciones de rápida implementación o acciones a corto plazo – de implantación de área local, su documentación y su posterior despliegue o extensión al resto de la organización, y si cabe permitiendo su estandarización.
Por tanto si una organización quiere certificar su modelo de gestión Lean y cumplir los requisitos que establece la Norma ISO 18404 para la implantación de Lean y/o Sis Sigma, en resumen y a modo de conclusión debe demostrar ante la autoridad competente que audita:
En cuanto a la estructura de soporte o modelo Lean y al aseguramiento de la mejora continua:
– Planificación, establecimiento, actualización y continua aplicabilidad de procesos de vigilancia, medida, análisis y mejora necesarios.
– Adecuación y tenencia de una mejora continua de su despliegue organizativo.
– Determinación de los objetivos adecuados, creando métricas de desempeño.
– Revisión de la consecución de esos objetivos, revisando la validez de éstos y de las métricas utilizadas en el despliegue.
– Uso justificable de métodos empleados y también de técnicas estadísticas apropiadas.
– Facilita el aprendizaje organizativo.
En cuanto a la gestión de sus recursos, en especial de sus recursos humanos:
– Provisión y empleo de modo efectivo de los recursos necesarios para dar soporte a las implantaciones Lean.
– Mejora continua de su eficacia y alcanzando los objetivos definidos bien con recursos internos o externos a la organización.
– En cuanto a los recursos humanos: adquisición y mantenimiento de las competencias adquiridas según el nivel o rol competencial, mediante la aportación periódica de evidencias satisfactorias derivadas de su experiencia laboral y su formación. De un año en el caso del Lean practicante y de tres años en los roles de experto y líderes Lean .